“¿Quien es mas culpable? ¿Quien peca por la paga o quien paga por pecar?...”Oficio milenario y reconocido desde los inicios mismos de la historia…oficio con la grilla más variada de términos q sin ser sinónimos llevan al mismo significado, tal es el caso de meretriz, prostituta, mujer de vida fácil, trabajadora social, o el más usual de los vocablos referidos a estas mujeres, q su escritorio es su cuerpo y su oficina esa calle: las tan famosas musas, al q el mundo llama “putas”.
De muchos improperios son el blanco, y de las mas variadas discriminaciones son esclavas…pero aun así y siempre firme, mantienen su labor; son el refugio de almas sin consuelo, q eyaculan en su cuerpo, el peso todo de sus males.
Cuantas son, y fueron el inicio de una vida sexual sin experiencia?...cuantas se han convertido en las autoras intelectuales, de muchas noches de placer moralmente estructuradas?...cuantas son las dueñas de experiencias posteriormente elogiadas?...cuantas esconden entre sus pechos un fracaso q será contado como éxito?.
Que gran injusticia q acarrean estas damas…ya q nada fácil debe ser su cometido…mil siluetas acarician sin problemas, y mil talentos custodian sin decirlos…gordos, flacos, feos, cojos, pobres, ricos, suaves, violentos…y sin jamás decirles NO, los acogen solas sin remedio…
Y si las putas son tan putas y las vírgenes tan vírgenes…quizás por tanta virgen, es q en el mundo hay tanta puta…preconceptos tan fundados, en la mas utópica realidad, de creer q siendo puta, jamás a señora alcanzará. Ser señora no es tener entre sus ropas solo un hombre, ser señora es q ese hombre vea una puta en su señora.
No es que quiera reivindicar este oficio milenario, solo quiero soslayar ese cruel imaginario, de creer q la puta, es del diablo un emisario…son almas q están a oscuras, por una envidia milenaria, son un cuerpo sin un nombre o quizás solo un nombre para un cuerpo…hasta a Jesús se lo involucra, con una mujer “pecadora”, jamás se sabrá bien la historia de esa humilde servidora…quien apedreada por un pueblo, de hipócrita comportamiento, supo guardar su secreto y ser una puta en el recuerdo…
Y así prosigue la historia, tal falaz y mentirosa, alimentando personas q piensan q sus señoras, jamás serán “pecadoras”…pero mordiendo entre sus noches, sus almas tan lujuriosas deseando q sean bien putas, solo de noche, sus señoras.
Es q la puta siempre fue, un necesario instrumento…a veces tan solo acaso, un hostil elemento, dador de sexo y amor…y de señoras alimento.
Que la noche las contenga y q el día las cobije…q la vida recompense a esas mujeres infelices…q son más q mujeres, y a las q uno nunca elije…buscando entre las “señoras” una puta q sea virgen…
