sábado, 31 de agosto de 2019

LOS MEDIOS, EL PODER Y LA VERDAD


El tema de la verdad es uno de los más complejos de la filosofía. Acompaño a Protágoras y a su formidable frase “El hombre es la medida de todas las cosas”.
Durante la Edad Media el problema no fue difícil. Dios poseía la verdad y se la revelaba a los hombres. O mejor dicho a los pastores. A la institución eclesiástica. Surge eso que Foucault llama “poder pastoral”. Los buenos siervos de Dios siempre se sienten en pecado, acuden al buen sacerdote y, en el confesionario, le dicen las opacidades de su alma. El pastor conoce todo del siervo y el buen hombre no sabe nada del pastor. La “verdad” que Dios revela la recibe la Iglesia y el que no la cumpla será castigado por la Inquisición. Descartes viene a establecer una nueva verdad. Al dudar de todo, duda también de Dios. ¿Qué es lo que le permite dudar de todo? Su pensamiento. ¿Qué es aquello de lo que no puede dudar? Claro está: de su pensamiento. La verdad que viene a instaurar Descartes es la de la razón.
 Todo cambia con Kant. Kant es un filósofo fundamental. Lo que hizo todavía sirve. Dice: todo conocimiento empieza por la experiencia pero no se reduce a la experiencia. O sea, todo conocimiento empieza por la experiencia, por lo fáctico, por lo empírico. Por los hechos. Hegel dirá: Lo verdadero es el todo. Tomemos cualquier instancia de la dialéctica histórica. Tiene tres momentos: afirmación, negación de la afirmación y negación de la negación. El tercer momento es la síntesis de los otros dos y los contiene en una totalidad que los contiene en tanto superación. Este tercer momento es la totalidad. Y la totalidad –en Hegel– es lo verdadero. Sobre todo al constituirse en tanto sistema. (El vaso está medio lleno y medio vacío…ese es el todo). Adorno (en el siglo XX), oponiéndose a la dialéctica hegeliana, lanzará un famoso dictum: La totalidad es lo falso.. Pero siempre hay algo que nunca falta: la empiria, la materialidad. Nietzsche dice: “No hay hechos, hay interpretaciones”. Pero sí: hay hechos. Sólo que la verdad se establece por medio de la interpretación de los hechos. Sólo que, sin hechos, no hay interpretaciones.
Sin hechos, no hay interpretaciones. Foucault partiendo de Nietzsche y Heidegger establece la verdad como lucha de interpretaciones. La verdad es de este mundo, dice en Microfísica del poder. En La verdad y las formas jurídicas establece que hay una lucha por la verdad. Algo que también hace en Poder y verdad. Se lucha por la verdad porque la verdad es la que establece el poder. En suma, de todas las interpretaciones de los hechos van a triunfar aquellas que puedan acumular más poder. De aquí el interés de los monopolios en conservar lo que han logrado. Es fácil: si yo tengo doscientas o trescientas bocas comunicacionales a través de las que enuncio mi interpretación de la realidad, ésta se transforma en la verdad porque logro convencer a la mayoría. La verdad es hija del poder. Hoy más que nunca por el despliegue agobiante de los medios de comunicación. Esto no significa que no existan verdades alternativas a la del poder mediático. Pero serán muy débiles. Ya que el monopolio mediático (y, no lo olvidemos, los medios de comunicación son el partido político de la derecha) se ha ido devorando a todas las fuerzas competitivas del mercado. El mercado no es libre y es antidemocrático: se lo devoran los monopolios y los oligopolios, que concentran el poder adosando a los competidores o llevándolos a la ruina.
Pero todo ha cambiado. Un cambio en la ética periodística. Vimos que todas las filosofías partían de los hechos. Kant requería de la experiencia. De aquí que sea nuestro ejemplo predilecto. Todo conocimiento empieza por la experiencia. El periodismo nació para decir la verdad. Se diferencia en esto de la literatura. El buen periodismo dice la verdad, la buena literatura miente. Esta es una frase indiscutible y llena de orgullo a los escritores.
Digamos que Kant jamás diría que no parte de la experiencia. Que Nietzsche no negaría que parte de los hechos para interpretarlos. Y que esa guerra por la verdad que postula Foucault también se basa en la facticidad. En el periodismo esto es lo que ha muerto. El periodismo ya no parte de los hechos. Esta fue su tarea primordial desde su nacimiento. El periodismo informaba. Pretendía informar imparcialmente. Aquí radicaba su seriedad. Pretendía ser un tábano para mantener alertas a los hombres y advertirles que no adhirieran a la falsedad. O pretendía ser un clarín sobre los grandes problemas argentinos, para no eludirlos, para enfrentarlos, para decir, sobre ellos, la verdad. Ahora el periodismo ya no trabaja sobre materialidad alguna. Al estar en constante estado de beligerancia deja de lado lo fáctico. Ya no parte de los hechos, los inventa.
Y para ser fashión en este 2019 diré que este gobierno (y no el anterior) sucumbió en la alternativa inmunda de los trolls. Se los describe como una persona con identidad desconocida que publica mensajes provocadores, irrelevantes o fuera de tema en una comunidad en línea, como pueden ser un foro de discusión, sala de chat, comentarios de blog, o similar, con la principal intención de molestar o provocar una respuesta emocional negativa en los usuarios y lectores, con fines diversos (incluso por diversión)​ o, de otra manera, alterar la conversación normal en un tema de discusión, logrando que los mismos usuarios se enfaden y se enfrenten entre sí. Un presente y una realidad horrible. Somos presos de una mentira hecha verdad. Clarín miente – C5N miente – la Nación miente – todos mienten…y así nos han dejado sin la verdad. Nos la quitaron; secuestraron y desaparecieron nuestro derecho a saber, a informarnos. Somos masas dominadas por la televisión a través de los comunicadores. Nadie sabe nada y todos opinan y opinamos. “Lo malo del ignorante es que no sabe, que no sabe”.
Los medios recalcitrantes están hundiendo al periodismo. Costará mucho que recuperen la fe de los lectores, o de muchos de ellos que no se dejan engañar fácilmente. Ustedes, señores, al apelar a la mentira como arma de antagonismo, están matando a la verdad. Y eso no tiene retorno. Y es, además, imperdonable.

miércoles, 24 de julio de 2019

LA MUERTE Y LA VERDAD


Un tema que dio según Platón origen a la filosofía, argumentando que “la filosofía es la meditación de la muerte”. “El vínculo del ser humano con la muerte es ontológico. Esto significa que no es algo exterior, algo de lo que podríamos prescindir y seguir siendo humanos. La muerte nos constituye”. Dice Darío Sztajnszrajber​. 
Como es lógico yo no vengo a pronunciar verdades sobre un tema que ha movilizado a la humanidad toda. No tengo ni el intelecto, ni la capacidad como para traer respuestas reveladoras sobre este tema. Solo intentaré dejarles preguntas abiertas, para que cada uno intente construir una verdad que le cuadre.
Soy de los que piensa que la verdad no existe. Siempre hay una verdad superadora de la verdad anterior. Quien dice poseer la verdad no solo miente, si no que intenta empapándose de poder, dominar al otro. Porque eso sería la verdad: PODER. Si yo tengo la verdad y ustedes no, yo estoy por arriba suyo. La razón me acompaña y ustedes no son más que un conglomerado de “equivocados”. Mis lectores: las grandes macanas de la humanidad se produjeron por aquellos que se empoderaron con la bandera de la verdad y decidieron someter al resto: a los otros, los equivocados. Y así comenzar con la gran enfermedad de la humanidad, que es el no reconocerse como iguales; creyendo que el otro al no poseer la verdad es un “ajeno”. El ejercicio de aceptar que no poseemos la verdad, es el primer paso hacia el consenso y la común-unión. Es por eso que todos golpeamos a las puertas de esta orden; ya que intuíamos que la verdad, profanamente impuesta, no alcanzaba para respondernos todas nuestras preguntas. La búsqueda de la verdad constante es la esencia del librepensamiento.
El pensar a la verdad como algo inalcanzable nos hace libres. Nos permite siempre entender que existe un horizonte al que aunque más nos acerquemos, este más se aleja. Y así luchar por siempre superarnos. Me gusta pensar a la verdad como un fuentón de agua donde uno se lava la cara (en el acto placentero de empaparse con la verdad). Pero sabiendo que el agua que uno levanta con las manos es solo una porción mínima de toda esa agua (de la verdad); y que la mayor parte de esta aún continúa en la fuente. Es más, filosofando podemos decir que ese pedazo de verdad en nuestras manos, se nos escurre entre los dedos con el tiempo; haciéndonos ver que el paso del tiempo nos hace quedar cada vez con menos verdad en nuestro poder. Nietzsche dice: “Dios ha muerto, lo mataron los hombres”. Si reemplazamos el sustantivo “Dios”, por el de “verdad”; este filósofo alemán nos ilumina con la idea de que los hombres asesinan a la verdad, tirándola por la borda y edificando una nueva, condenada a la misma suerte, por los mismos verdugos; y así la historia se repite una y otra vez.
Entonces entendiendo que nadie tiene la verdad, volvamos al tema de la muerte. ¿Qué es la muerte? ¿Lo que viene después de la vida? ¿Es una parte de la vida? Cual final de canción, parte de la misma pieza. ¿Es la nada misma?
Pero yendo más allá ¿por qué da cierto prurito hablar de la muerte? ¿Por qué es incómodo hablar de ella? Si dijimos que era algo ineludible, si dijimos que ella nos constituye; ¿por qué no aceptamos la idea de que es una realidad? La respuesta es MIEDO. Miedo a lo desconocido, miedo al ¿Cómo iremos a morir?, miedo al “más allá” y a todo el universo metafísico que conlleva al trascender (edén – paraíso – infierno – oriente terno – etc.). ¿Miedo al escéptico ateo que piensa que nada sigue luego del ocaso? ¿Será miedo al abandono de los que dejamos en este plano (hijos, esposas, padres)?
A mi entender…todas mentiras y excusas que ocultan la verdadera razón. ¿Por qué? ¿Miedo al cómo vamos a morir? La humanidad viene batallando contra la muerte desde momentos inmemoriales; todos hemos estado cerca de algún moribundo. Nosotros los médicos muchísimo más, pero en realizad la muerte trasciende a la ciencia; y todos a lo largo de la historia  hemos visto morir a un anciano, a un joven, a un niño, a un paciente con cáncer, a uno con hiv. Todas las muertes aunque distintas son iguales. Todos sabemos cómo murieron los que ya no están, y los hemos acompañado en esa agonía. No desconocemos como morir; le tenemos miedo al hecho por sí mismo.
En relación, al argumento “de los que dejamos”, también carece de fundamento. La humanidad se sobrepuso a las muertes de las personalidades más importantes y aquí estamos. Los católicos asesinan todos los años al hijo de Dios, y aun así a los tres días todos vuelven a sus actividades cotidianas como si nada hubiera pasado. Ósea, que también sabemos que los que dejamos, aunque sufran, seguirán su camino y se sobrepondrán al evento traumático de la pérdida. ¿Entonces? Si todos sabemos que nos vamos a morir; si tenemos una idea de cómo vamos a morir; que luego de irnos todo seguirá en este plano como antes… ¿Por qué el miedo? Tengo dos aproximaciones a ese interrogante: el primero es que nos da angustia el “cuando” (no el cómo); todos sabemos que nos vamos a morir, pero para todos la muerte está lejos. Como que se vive la idea de muerte en el otro y no en uno mismo como algo probable. Esa incertidumbre nos angustia; la idea de hoy o dentro de 40 años nos desconcierta. Y segundo: le tenemos miedo al dejar de ser. Le tememos al ridículo ateo que piensa que luego de la última respiración no habrá más que tierra y gusanos. Le tememos al no ser más; al ocaso de nosotros mismos. Es el egoísmo y la necesidad de trascender que nos oprime el pecho. No estamos preparados para dejar de existir. Y por más que nos arraiguemos a la fe particular de cada uno, la posibilidad de que el ateo escéptico tenga razón nos atormenta. ¿Y si este descreído tuviera razón? Hagamos un juego: en una cara de la moneda el G.A.D.U. nos confirma fehacientemente que luego de la vida viene algo más. Y en la otra lo contrario, nos certifica que nada hay luego del deceso. En la primera se terminarían las dudas; nadie teme al sábado, ya que todos saben lo que harán mañana. Y en la otra se desencadenaría un descontrol total pensando en que hay que explotar lo que queda de vida, ya que todo se termina sin remedio. Por lo cual, el miedo a la muerte radica en el egoísmo de no saber qué pasará con nosotros.
En la plancha anterior hablé sobre la “muerte digna o buen morir”; entendiendo a esta como un proceso irreversible en donde el declinar de todas las funciones vitales llevan al cese de la homeostasis y finalmente al deceso del individuo. Esta es la definición científica de la muerte, que a nadie le importa. No seamos hipócritas, el miedo no pasa por si será un acv, un infarto o un accidente de tránsito; el miedo pasa por el hecho de que un día va a pasar, y no sabemos qué sucederá con nosotros.
Entonces a modo de conclusión hoy puedo decir que la muerte es la única verdad. Lo único que no podremos evitar; una constante irremediable. Antes dije que la verdad no existe: hoy solo sabemos que lo único que no es y es al mismo tiempo, es la muerte. Hasta que los asesinos de los que habla Nietzsche, asesinen a este Dios en forma de verdad; esto es todo lo que podremos palpar sobre el ocaso de nosotros mismos.

jueves, 20 de junio de 2019

RAROS PEINADOS NUEVOS

La involución no progresa por sí sola, progresa por los que embebidos en evolución se predisponen, sin quererlo, a involucionar.
Los otros días asistimos a unas charlas entre nuestras paredes llenas de argumentos faltos de todo contenido serio, vacíos de carga académica, y totalmente antisociales.
Contemplamos a un señor disfrazado de mujer que nos decía que luchaba por el cupo trans. Este señor fantasioso de ser algo que no es, nos daba cátedra de sus resumidos y casi nulos argumentos para defender su postura. A saber:
·         Que el 80% de las personas que desempeñaban esa actividad no habían terminado la secundaría; y era menester que el estado hiciera políticas para abordar “su” problemática.
Mi estimado amigo no es culpa del estado que usted no se haya instruido, y me representa una injusticia total que haya que darle un espació en un efector público, como Ud. reclama, ya que ese lugar debe ser ocupado por concurso, y debe ser el más idóneo el que lo ocupe. Usted, que no se instruyó, debe ocupar otros trabajos para los que no se necesite tal preparación, por ejemplo limpiar casas (siempre y cuando el dueño de esa casa no exija esa cualidad). No es culpa del estado sus decisiones. En todo caso todas aquellas personas sin secundaria debieran tener ese mismo derecho al cupo. ¿O la condición trans prima sobre otra?
·         El planteo de cupo es injusto incluso aritméticamente. De diez puestos de trabajo, 3 son para los trans. Un hombre heterosexual solo podría acceder a 7 cargos, cuando ud. a los 10. Teniendo Ud. más posibilidades que aquel en acceder a dicho puesto. Una injusticia social.
·         Evidentemente la idoneidad no es una preocupación suya. Ya que solamente le interesa que su comunidad no goce de desempleo. Importándole muy poco la realidad de un país donde el 30% está desempleado. A la mierda los pobres, los metalúrgicos, las amas de casa y demás personas desempleadas. A ud. solo le importa que el 0,035% de la sociedad NO sea discriminado. El resto es parte del patriarcado.
Hablemos de patriarcado un ratito y diferencia de oportunidades:
·         En el 2018 llegan a graduarse a nivel universitario un 33% más de mujeres que de hombres.
·         La esperanza de vida de las mujeres es diez años mayor que la de los hombres.
·         En las guerras muere un 97% de hombres y el resto mujeres (dato aportado por la onu sobre la guerra de irak-usa).
·         Personas en situación de calle: un 80% son hombres.
·         El 80% de los suicidios son hombres.
·         En argentina en el último año el 79% de los asesinatos fueron hombres.
·         El 81% de los accidentes laborales son de los hombres.
·         En EEUU el 65% de los bienes pertenecen a las mujeres.
·         La primaria y la secundaria el número de finalización es igual. No sé por qué Ud. dice que no pueden hacerlo.

Decía ud. en su insustentable charla que el patriarcado las estaba matando. Vamos a los números:
·         Según datos oficiales en el 2016 murieron 3269 personas, 2233 hombres (80%) y 536 mujeres.
·         En Perú en el 2017 se produjeron 38 homicidios a personas del colectivo LGTBIQ. Lo que no cuentan es que 20 de esos los asesinos fue la pareja del occiso, lo cual convierte al hecho en un drama pasional. Y los 18 restantes fueron en el contexto de robos. Nadie defiende, ni disculpa los asesinatos…pero es distinto morir POR SER TRANS, que morir siendo TRANS. ¿Se entiende la diferencia?
·         Se habla de un número elevadísimo de feminicidios. NINGUNO COMPROBADO. Entiéndase al feminicidio LA MUERTE QUE SE PRODUJO POR LA CONDICION MISMA DE MUJER. Te mato por ser mujer ¿se entiende? Un crimen pasional cualquiera sea el desencadenante no es un femenicidio.
EL PATRIARCADO NO LAS ESTÁ MATANDO…LA VIOLENCIA CRECE Y ES ASÍ. PELIEMOS CONTRA ELLA, TODOS JUNTOS. NO NOS ENFRENTEMOS ENTRE NOSOTROS CON MÁS VIOLENCIA.
En otra parte de su charla inacabada le preguntaron que era ser trans, hetero-cis o transgénero. Si ud. no la supo contestar, imagínese nosotros que no entendemos nada de esta fantasía que se nos quiere imponer como algo normal y cotidiano.
La ideología de género es un conjunto de ideas anticientíficas que entienden que el género es una construcción cultural. Abriendo una puerta nefasta y funesta hacia una innumerable variedad de géneros que serían difíciles de explicar de otra manera, como la pedofilia o sexo intergeneracional o childrens love (como se lo llama en el primer mundo), el sexo transespecie, necrofilia, o la asexualidad. Explicar.
Estimado señor, porque así lo percibo yo, aunque Ud. se sienta mujer. Y también tengo derecho a expresarme ¿o no? Creo que sus fundamentos no pueden ser tenidos en cuenta y mucho menos expresados en nuestro templo. De todos y no solo de algunos.
Vivo con gran sorpresa que nuestras paredes hayan oído sus reclamos y no se escuchen en ellas cosas muchísimo más importante:
·         20 muertes por día por accidentes de tránsito en el 2018. Que no importan.
·         2293 muertes por inseguridad en el 2017. Que no importan.
·         20000 nuevos casos de cáncer de mama por año. Que no importan.
A LA SOCIEDAD, COMO TEMA DE AGENDA PUBLICA, LE IMPORTA QUE EL 0,035% DE LA SOCIEDAD SANTAFECINA (COMUNIDAD TRANS) ACCEDA A UN TRABAJO A TRAVÉS DE UN CUPO LABORAL. UN BARBARIDAD QUE DUELE…..yo voto por el diluvio y volver a arrancar de cero.

miércoles, 24 de abril de 2019

TODOS SOMOS TODOS


Hoy quiero hablar sobre “la ideología de género. Se habla de ideología de género desde 1966; cuando el médico psiquiatra John Money hablaba sobre la neutralidad de los sexos; decía: “las personas nacemos NEUTRAS sexualmente, y es la cultura la que nos determina de una u otra manera”; explicaba el especialista. Cabe decir que no aplicó el método científico a su teoría; convirtiendo a este enunciado en un parecer, opinión, creencia o especulación.
Pero… ¿Qué es la ideología de género? Es una ideología (es decir, es un sistema de pensamiento cerrado) que defiende que las diferencias entre el hombre y la mujer, a pesar de las obvias diferencias anatómicas, no corresponden a una naturaleza fija, sino que son unas construcciones meramente culturales y convencionales, hechas según los roles y estereotipos que cada sociedad asigna a los sexos.
A toda esta ideología se suman los colectivos LGTBIQ (LESBIANAS – GAYS: entendiendo el término del inglés: “divertido”, cuestión que nada tendría que ver con la sexualidad – TRANS –BISEXUALES- INTERSEX: personas cuyo sexo biológico no se ajusta a la definición binaria hombre/mujer. Existen múltiples combinaciones de atributos sexuales que no se ajustan a ninguna de las dos categorías mencionadas) – QUEER: del inglés: raro. Es un término que desea que no tengas que presentar una tarjeta de identidad antes de entrar en una reunión). Y todos ellos con las banderas de la inclusión, nos llaman a que reflexionemos sobre temas como la sexualidad, la homofobia, el patriarcado, el feminismo, el lenguaje y demás temas que hoy priman en toda agenda política.
Hablemos de feminismo, feminicidio y patriarcado. Se enarbolan las banderas de la violencia de género, cuando en realidad lo que aqueja al mundo es la violencia en sí. NO LA VIOLENCIA DE GÉNERO. Cuando uno dice “no a la violencia de género”, deja abierta la posibilidad a que otro tipo de violencia sí estaría permitida. Ejemplo: “no a la caza del ciervo”, deja la posibilidad de que sí se pueda cazar otro tipo de animal. ¿Se entiende? Es NO A LA VIOLENCIA TODA. NO SOLO A UNA PARTE. LA VIOLENCIA AUMENTA EN EL MUNDO.
ü  Según datos oficiales en el 2014 murieron 3269 personas, 2233 hombres (80%) y 536 mujeres.
ü  En Perú en el 2017 se produjeron 38 homicidios a personas del colectivo LGTBIQ. Lo que no cuentan es que 20 de esos los asesinos fue la pareja del occiso, lo cual convierte al hecho en un drama pasional. Y los 18 restantes fueron en el contexto de robos. Nadie defiende, ni disculpa los asesinatos…pero es distinto morir POR SER HOMOSEXUAL, que morir siendo homosexual. ¿Se entiende la diferencia?
ü  Se habla de un número elevadísimo de feminicidios. NINGUNO COMPROBADO. Entiéndase al feminicidio LA MUERTE QUE SE PRODUJO POR LA CONDICION MISMA DE MUJER. Te mato por ser mujer ¿se entiende? Un crimen pasional cualquiera sea el desencadenante no es un femenicidio. Si yo me peleo con mi mujer (que es judía) y la mato porque me engaña: según esta corriente ¿estaría cometiendo un femenicidio antisemítico? No, sería un crimen pasional. Injustificable, y debe caer sobre mi todo el peso de la ley; pero no acuñar términos que no se aplican.
Hablemos de patriarcado y diferencia de oportunidades:
·         En el 2018 llegan a graduarse a nivel universitario un 33% más de mujeres que de hombres.
·         La esperanza de vida de las mujeres es diez años mayos que la de los hombres.
·         En las guerras muere un 97% de hombres y el resto mujeres (dato aportado por la onu sobre la guerra de irak-usa).
·         Personas en situación de calle: un 80% son hombres. ¿Cuantos linyeras mujeres conocen?
·         El 80% de los suicidios son hombres.
·         En argentina en el último año el 79% de los asesinatos fueron hombres.
·         El 81% de los accidentes laborales son de los hombres.
·         En EEUU el 65% de los bienes pertenecen a las mujeres.
·         La primaria y la secundaria el número de finalización es igual.
El patriarcado no es otra cosa que una excusa para hablar de algo que no se si existe. Creo que la mujer es más inteligente, más responsable, más constante, más aplicada, más ordenada, más eficaz y eficiente que el hombre. No es justo establecer “cupos”. Es auto discriminatorio plantear un porcentaje de vacantes. Se destruye así la idoneidad. Que sean 100% mujeres si se lo merecen; que sean todos mujeres si son las más capaces. Que me opere el mejor medico; que me defienda el mejor abogado; que construya el puente el mejor ingeniero más allá de su condición sexual.  A nadie debiera importar que pasa en la intimidad de cada ser, lo que importa es la idoneidad para el cargo.
Me animo a decir que el temita del patriarcado es una mentira para victimizar un colectivo de mujeres que no necesita victimizarse. Las verdaderas protagonistas no lo necesitan. Son aquellas mujeres que llegan a lo más alto que se puede llegar por ser las más idóneas. Las mejores. Un gran aplauso a esas mujeres.
Pero volviendo a la inclusión de la que tanto hablan. La intención de los medios de comunicación es totalmente explicita y clara: nos quieren contar en todos los programas que las distintas realidades de los géneros son cotidianas. Y que debemos incluirlas en nuestra cotidianeidad como tales: cosas “normales”. A priori estoy de acuerdo. Pero todos tenemos un pariente con síndrome de Down; paralítico; con secuelas neurológicas; o con algún retraso mental. Todos conocemos las peripecias de la vejez avanzada: el amigo Alzheimer, la demencia senil, parkinson, etc. ¿alguien recuerda algún programa de tv que retome las temáticas antes mencionadas? ¿Algún ciego en alguna telenovela? ¿Algún sordo (más allá de Bernardo en el zorro que no era sordo)? Entonces si estas minorías también existen ¿por qué no se muestran? La respuesta es clara: PORQUE NO VENDEN. Y siguiendo el análisis. ¿Por qué vende la ideología de género y los colectivos que la acompañan? Mi respuesta es el CONSUMO. Ser mogólico no mueve la economía (y uso ese término para que nos duela y veamos la realidad).  
Siguiendo con la inclusión en esta reunión hay médicos, abogados, contadores, ingenieros ¿alguno estaría en condiciones de hablar mediante lenguaje de señas con un sordomudo? ¿Corregir a un ciego leyendo braille? ¿La educación integrativa para los chicos con capacidades diferentes existe en todos nuestros colegios? ¿Nuestros viejos están incluidos en nuestra organización social? ¿Los pobres son incluidos por esta sociedad o marginados? La banderita de la inclusión hace agua por donde se la mire.
Pero cuidado…para que una boludez se imponga no es culpa de los boludos que la imponen. Tiene que haber un estado que sea cómplice de la boludez que quieren imponer esos boludos. Si hermanos, el estado es cómplice. La operación para el cambio de género es gratis; las terapias hormonales también; el aborto también…pero no seamos imberbes; NADA ES GRATIS. Es gratis para el que usufructuará de ese derecho, pero lo “gratis” lo pagamos todos. Es el estado quien impone al pueblo pagar la fantasía de alguien que se percibe de manera diferente a la que es. Mi más sentido respeto al colectivo LGTBIQ, PERO NO PODEMOS HACER DE TODOS UN PROBLEMA DE UNA MINORIA DEL 0,035% DE LA SOCIEDAD. El estado es cómplice señores. Y saben ¿por qué? Porque hay que redirigir el foco de la audiencia hacia temas menos importantes, para no abordar los que SI debieran importarnos. Al pueblo pan y circo ¿recuerdan?
Estos grupos abogan por la tolerancia. ¿Cuál? ¿La de nosotros o la de ellos o la de todos? Mi viejo tiene 74 años y creció en una sociedad que veía mal la homosexualidad. ¿Lo matamos? ¿Lo mandamos a la hoguera o a un geriátrico para no oír su retrógrada opinión? Y con los que no apoyan a este feminismo radical que aboga por la “muerte al macho”, o “abortemos por si sale policía”, o “comer carne es de hetero”, o demás títulos absurdos de un colectivo de mujeres intolerantes y autoritarias que lejos de buscar la común-unión, buscan destruir el modelo imperante. ¿De qué inclusión me hablan si los que piensan distinto no pueden hablar?
Y ahora lo último. La EDUCACIÓN SEXUAL INTEGRAL. Para adoctrinar a las generaciones venideras. No quiero explayarme ya que será tema de una próxima plancha. Pero la idea no es solo prevenir un abuso (cuestión que aplaudo); si no también promocionar esta ideología de género, que además de todo lo expresado anteriormente, quiere plantear la pedofilia como una nueva variante de género. Expresando abiertamente que pedofilia no es lo mismo que abuso sexual infantil.
Para concluir no es que el TODOS NO INCLUYA AL TODES…ES QUE EL TODES NO QUIERE PERTENECER AL TODOS. La galaxia, la tierra, la naturaleza, la humanidad, la sociedad, la familia…todos términos de género femenino, que llevan implícito la pertenencia del hombre en su significado. No es discriminatorio que sean femeninos; es retorcido y hasta idiota sentirse excluido por ellos. Dejemos de perder tiempo útil en el TODES y volvamos a ser TODOS; que les aseguro que si la humanidad se une en vez de dividirse, va a progresar muchísimo más de lo que lo ha hecho hasta ahora.
TODOS SOMOS TODOS. TODES SON SOLO ALGUNOS.

EL SILENCIO

“En el silencio se oculta un poder que en vano buscaríamos en la palabra hablada; todas las grandes fuerzas y las posibilidades latentes de la Naturaleza trabajan en silencio, y en el silencio cumplen sus mayores milagros.
En general, puede decirse que la intensidad y valor de una fuerza y su real eficiencia obran en razón inversa del ruido con que puede aquella manifestarse exteriormente; el ruido denota un desperdicio de energía que no se ha concentrado perfectamente en la finalidad hacia la cual la misma fuerza fue dirigida. El éxito de un proyecto depende de mantenerlo en secreto”…nos enseña Aldo Lavagnini.
Pero el silencio tiene muchísimas más aristas con las que podemos reflexionar. El silencio es la mejor respuesta a una pregunta bulliciosa. Es el disfraz del sabio, como el ruido lo es del que cree serlo. Quien sabe y dice que sabe, en realidad no sabe nada…reza el refrán. Lo prepotente del argumento denota lo insustentable de la idea.
En nuestra vida profana estamos inundados de silencios que a veces seria hasta importante oír.
El silencio también es complicidad. Hiram muere sabiendo que tres compañeros lo traicionaron, pero desconoce que fueron quince los que en realidad orquestaron la revuelta. Hay doce compañeros que cómplices de las virtudes del silencio, se ocultan entre las sombras de los que hoy lloramos la muerte del maestro. Quizás más adelante la leyenda me contradiga, pero hoy el silencio apaña aquella traición. En el silencio se escondieron las iglesias mientras sucedían atrocidades en las sociedades del pasado; preguntándonos si fue silencio o complicidad.
Nuestras calles se inundan de argumentos ruidosos de pañuelos verdes o celestes; mientras duermen en silencio millones de embriones crio-conservados fecundados in-vitro, sin darle a este problema solución alguna. Si todos acordamos que hay vida desde la concepción, estos seres solo hacen silencio, ya que el sistema consumista imperante no los pone en agenda para ser escuchados.
En la Argentina el silencio también fue protagonista. Hay 30000 vidas calladas, que hoy son defendidas en el bullicio de marchas por la memoria; mientras son silenciadas las víctimas de la guerrilla. No trato de empezar un debate político, solo de exaltar que de ambos lados el silencio no ha ayudado de mucho. El silencio es un arma mortal que puede utilizarse para el bien y para el mal indistintamente.
El silencio es del aprendiz que debe aprender. Que nada tiene para decir, ya que solo “operativamente” debe formarse para crecer. Un maestro no puede sentirse tal, si no sabe aprender mientras enseña. El silencio es respeto, es cautela. Pero en un aprendiz que no pregunta, que no objeta, que no cuestiona…el silencio puede ser desinterés, apatía o hasta tibieza si se conforma con lo escrito y enseñado en instrucción.
Al finalizar cada tenida juramos mantener SECRETO sobre todo lo expuesto en tenida. Pero cuidado, que el masón debe diferenciar al silencio del secreto. La masonería a través de sus hombres debiera ser escuchada por las calles profanas para poner luz en lugares que hoy domina la oscuridad del no conocimiento. Secreto ritualístico, pero no silencio procedimental. Las obras arquitectónicas de Hiram no hacían silencio; ostentaban la perfección del maestro, hacia los ojos profanos de un mundo que no sabía interpretar la belleza de sus obras. Así debemos ser los masones en la vida profana, tal cual lo eran las obras de Hiram. Debemos hacernos escuchar para que la luz de la masonería esparza su belleza por el mundo “del afuera”.
El silencio es calma, es prudencia, es quietud, es sabiduría. Es muchas cosas a la vez. Es bueno o malo dependiendo de su finalidad. Lo importante es saberlo contemplar, interpretar y a veces hasta interpelar para conocer su verdadero significado. Quien hace silencio quizás no quiera hablar, o quizás no tiene nada útil para decir. “Solo aquel cuyo enunciado sea más útil que el silencio, tiene el derecho de interrumpirlo”.
Para concluir el silencio es muy importante para este grado. Y una prueba ineludible para nosotros que deseamos franquearlo. Pero creo que la verdadera prueba es practicarlo para la introspección y para alcanzar la sabiduría; y también combatirlo en “el afuera”, enarbolando las banderas de la libertad, la igualdad y la fraternidad; valores que deben volver a escucharse en un mundo que se esmera para olvidarlos. Es nuestro deber que así se cumpla. Fue el objetivo de muchos de nuestros hermanos que perecieron por ellos. Y es por ellos que no podemos callarnos. 

domingo, 3 de marzo de 2019

50 MÁXIMAS DE GARRIK

  1. 1)     Al saludar nunca dejes de ponerte de pie; de apretar bien la mano y de mirar siempre a los ojos.
    2)   No dejes de entrar a una pelea por miedo a perderla; mas nunca entres a una pelea si estás seguro de que vas a ganar. Eso sería aprovecharte de tu rival.
    3)      Siempre silva. Toda pena es menos pena con una copla en el alma.
    4)      Tus padres te ayudaron en tus primeros pasos; no los dejes solos en los últimos de ellos.
    5)      Desconfía de quien te halaga. Todo jinete acaricia a su caballo antes de montarlo.
    6)      Que tu hijo hasta los 10 años te tema; que te sienta su ejemplo hasta los 20 y que sea tu amigo el resto de tu vida.
    7)      La familia es lo único importante.
    8)    Siempre existe una verdad superadora de la anterior. Nadie es dueño de ella. Los dogmas son sus enemigos.
    9)     El verdadero enemigo, el verdadero obstáculo, el verdadero miedo está del otro lado del espejo. Tú eres tu propia meta.
    10) Los viejos son sabios. La fuente de la sabiduría. Un abuelo cayado es un libro sin leer, un consejo sin escuchar. Habla con los viejos, ellos saben más de lo que parece.
    11)   El amor es la única energía positiva. La única fuente para construir un futuro.
    12)   Si amas a alguien no la lastimes. Si amas a alguien no la encadenes. Si amas a alguien déjala libre.
    13)   El sexo sin amor es solo un buen momento. Carece de futuro, de mañana y de destino.
    14)   La música salva.
    15)   La mujer es la fuente de la vida; el hombre su espectador.
    16)   El insulto habla más del que insulta, que del insultado.
    17)   En una negociación nunca hagas la primera oferta.
    18)   En una discusión jamás levantes el tono de voz, ni te enojes. La calma es signo de victoria. El   que se enoja pierde.
    19) Una verdad dolorosa siempre duele menos, que una seguidilla de mentiras para explicar aquella  primera verdad.
    20)   Ten una mascota.
    21)   El trabajo dignifica. Que nadie te regale nada. Gánatelo. Las cosas que cuestan se disfrutan y   aprecian más.
    22)   Hola – Gracias y Perdón. Tres palabras que siempre debes usar.
    23)   Si sabes que tienes razón…entonces aprieta los dientes y hasta el hueso. (Ir hasta las últimas consecuencias).
    24)   Un amigo es un hermano que se elige.
    25)   Si una mujer dice NO…es NO.
    26)   Si una mujer no quiere ser madre aléjate. Será una resentida cuando se haya dado cuenta de su error. Obviamente ya será tarde.
    27)   La religión es el opio de los pueblos. Si nos hubiesen colonizados los vikingos, hoy américa   adoraría a Odín. La luz…siempre busca la luz.
    28)   Aprende a tocar un instrumento musical.
    29)   Habla más de un idioma.
    30)   No perfecciones el espejo. El interior es lo importante.
    31)   Que se quiebre pero que no se doble. Que tu SI sea SI…y que tu NO sea NO.
    32)   Una mujer inteligente es preferible a una mujer linda. La belleza no te hará reír. (se aplica a     ambos sexos).
    33)   Estate el mayor tiempo posible descalzo. Pisa cuantas veces puedas pasto verde.
    34)  Las estrellas esconden los secretos del universo. Contempla el cielo cada vez que busques   respuestas.
    35)  Los muertos están más cerca que los vivos. Háblales, pídeles consejos, ayuda, paz. Nunca   estamos solos.
    36)   La lluvia es un regalo. Mojarse hace bien. Camina descalzo bajo la lluvia.
    37)   Toma mucha agua. Más de 4 litros por día.
    38)   Cuida de tus plantas. Proteger su vida te hará responsable. Ellas lo agradecerán.
    39)   La televisión y el celular son enemigos.
    40)   Si el camino a la felicidad es sencillo; estás equivocado de camino.
    41)   Llorar hace bien.
    42)   En los cementerios hay solo huesos. Las almas son libres. Jamás me busques allí. Búscame por  el cielo. Seré como un pájaro cuidando tu pasar.
    43) Cree en Dios como principio creador, hasta que la ciencia demuestre lo contrario. El ateo carece de fundamento científico.
    44)   Lee mucho.
    45)   Haz deporte.
    46)   Cuando el sexo fue fácil de conseguir; el amor se hizo difícil de encontrar. Presérvate.
    47)   Todas las cosas que vayan contra la familia están mal.
    48)   Sede el paso.
    49)   Que nadie se aleje de ti, sin haberlo hecho sonreír.
    50)   Todo lo que se conoce se domina. Conoce a todos, mas no te des a conocer.

miércoles, 12 de diciembre de 2018

LA DUDA


La presunción de inocencia es un derecho que ha ido evolucionando junto con la ciencia jurídica; desde tiempos remotos se hablaba de ella en la antigua Roma. El jurista Ulpiano sostenía que “nadie debe ser condenado por sospechas, porque es mejor que se deje impune el delito de un culpable, que condenar a un inocente”; posteriormente, el marqués de Beccaria en su famosa obra “Tratado de los delitos y las penas” advertía que: ningún hombre puede ser llamado culpable antes de la sentencia del juez. Como podemos notar, ambos pensadores, bastante adelantados a su época, ya anunciaban la necesidad de reconocer la presunción de inocencia para evitar arbitrariedades o tratos injustos sobre la persona de quien se seguía un proceso jurisdiccional.
La presunción de inocencia constituye la máxima garantía constitucional del imputado, que permite a toda persona conservar el estado de “no autor del delito” en tanto no se expida una resolución judicial firme; por lo tanto toda persona es inocente, y así debe ser tratada, mientras no se declare en juicio su culpabilidad. La formulación “nadie es culpable sin una sentencia que lo declare así” implica que: solo la sentencia tiene esa virtualidad; al momento de la sentencia solo existen dos resultado: inocente o culpable; la culpabilidad debe ser jurídicamente construida, y esa construcción implica la adquisición de un grado de certeza; el imputado no tiene que construir su inocencia y no debe ser tratado como culpable; y que no deben existir ficciones de culpabilidad, es decir, partes de la culpabilidad que no necesitan ser probadas.
Todos asistimos en los últimos días a la denuncia terrible de una mujer, que denunciaba públicamente a un hombre por violación. Aclaro de ante mano que soy papá de una nena de dos años, soy hijo, soy hermano, soy esposo y amigo de muchísimas mujeres; y que de ser cierta la acusación elegiría el peor de los castigos contra el autor de dichos actos. Es más, si la víctima fuera mi hija y se demostrara la culpabilidad del agresor, dedicaría el resto de mi vida en la planificación de la venganza. Pero hoy no vengo a defender violadores, vengo a hacernos reflexionar sobre si ¿es correcto o no el juicio público mediático? Donde una persona ya es culpable de ante mano, juzgado por un colectivo de gente que se embandera detrás de la víctima y que sin importar la verdad ya emite juicios hacia un ya culpable.
¿Se vuelve de un escrache social de semejante envergadura? Si es culpable debiera arder en el infierno y conocer el séptimo círculo del dante. ¿Y si no? La verdad, mis queridos hermanos, esta sociedad ya hizo su juicio y poco importa el veredicto del juez. Porque, al menos yo, que me considero totalmente imparcial a este hecho, tengo clavada en mi pecho la peor de las dagas: la DUDA.
La verdad se retuerce y agoniza en la duda. Porque en estos casos nunca se podrá conocer la verdadera verdad (hoy tenemos dos verdades contrapuestas: la de ella y la de él); y un mar de especulaciones basadas en los miles de opinantes en esta argentina tan poco criteriosa. Porque hoy hay que demostrar la culpabilidad de este personaje, ya que su inocencia se presume. ¿Y si es culpable y no hay suficientes pruebas? ¿Y si es inocente por el mismo motivo? Ya no importa…y saben ¿por qué? Por la duda.  Este personaje ya es culpable aunque un tribunal lo declare inocente. Ya que en todos quedará este antecedente que dividirá nuestras conciencias en dos bandos: los que le creen y los que no.
Lo terrible es que la verdad ya no importe. Que el principio de justicia este tan descreído que a nadie le interesa llegar a él. Que nuestros jueces empachados de letargo y empapados de corrupción ya no son tenidos en cuenta. Que la justicia ya no es justicia si el pueblo no la va a tomar como una verdad. Que una sociedad sin justicia peligra de anarquizarse.
En este caso y en tantos otros en donde lo que prima es la duda: ¿se hará justicia?

martes, 17 de julio de 2018

EUTANASIA

Elegimos como nacer, como vivir, como disfrutar; que es placer y que no; elegimos como pensar, como actuar, si drogarnos o no, si suicidarnos o no, si abortar o no, si amar u odiar, si ser felices o no. ¿Por qué no podemos elegir como y cuando morir?
Nuestros diputados en un arrojo de progresismo o en una locura anticonstitucional decidieron aprobar un proyecto de ley (que ahora debatirá el senado), sobre la libre y voluntaria interrupción del embarazo. No quiero discutir ABORTO; pero sí quiero expresar que si una vida se puede “apagar” al inicio, también puede ser apagada voluntariamente por la misma persona al final. Concluyendo que la primera no puede alegar argumentos de porque sí continuar (ya que no puede defenderse y no tiene quien lo haga por él, ya que su propia madre quiere abortarlo); y la segunda: el paciente terminal, tiene más que frondosos planteamientos para elegir el cese de sus funciones vitales, ya que su agonía le pertenece.
¿Quién es el que pretende interponerse, con sus personales reflexiones, en cómo debo morir? ¿Quién es el que me va a prohibir encontrarme con ella cuando mi voluntad así lo disponga? ¿Quién es tan autoritario de querer hacer suya mi última voluntad? ¿Quién pretende, desde el clero, la lógica, o vaya a saber uno que fundamento decidir por mí, el día que quiero dejar este mundo? ¿Quién puede decidir sobre mi dolor? Retomo el párrafo anterior: Si una vida se puede interrumpir en el principio, porque no en el final?
Toda mi corta vida como médico luchando contra enfermedades junto al enfermo; a muchas les ganamos y contra muchas hemos perdido. Pero siempre he sabido que una sería el fin para mí paciente. La medicina debe promocionar la salud, prevenir y enfrentar la enfermedad, contener al enfermo terminal y proporcionar una muerte digna. Y la dignidad del morir solo el moribundo la conoce. Por eso es él quien debe elegir como escribir el final de su propia historia…él debe elegir como se va a despedir.
No quiero ver el final de mi vida anclado a un respirador; no quisiera que mis últimas escenas, en la gran película de vivir, sean sometiendo a los que me quieren, al martirio de verme sufrir y conmigo, sufrir ellos. Quiero morir erguido como he vivido y ser libre hasta en mi muerte.
La muerte es un descanso; es el mejor desenlace para la vida. La muerte es la vida, porque se vive mientras se muere. La muerte no da miedo, el miedo es no saber cómo afrontarla. Si morir será parte de mi vida…quiero ser yo el arquitecto de mis últimas respiraciones. Quiero decidir que si ya no puedo respirar por mí mismo…vivir en un respirador no sería gobernar mis actos, no sería ser mi arquitecto, no sería ganarle a la muerte sino solo demorarla…vivir así, es saberse muerto y no querer despedirse. Vivir así sería no querer vivir la última escena de la vida; y así perderse de oír el aplauso de un público, que solo nos recordara por lo que hemos hecho, y no por cómo nos hemos despedido.
Y no es esto un revés a los congresistas de diputados. Este es el “tema” de los temas. Desde tiempos inmemorables los grandes pensadores han discutido sobre la muerte y la eutanasia. Platón, ya como un adelantado, se expresaba en favor de esta última.
Hipócrates sostenía dentro de un juramento que alguna vez hemos hecho todos: “Jamás daré a nadie medicamento mortal, por mucho que me soliciten, ni tomaré iniciativa alguna de este tipo; tampoco administraré abortivo a mujer alguna. Por el contrario, viviré y practicaré mi arte de forma santa y pura.”. Mucho no lo respetamos al padre de la medicina, pero en fin.
Tomás de Aquino decía: “que la vida la da y la quita Dios”. En un arrojo de librepensamiento les pido que ante estos temas nos despojemos de nuestras pasiones metafísicas; y analicemos el tema de un modo racional, político y científico. Dejando de lado nuestras paciones.
Desde 1935 el tema se debate abiertamente en el mundo y ha tomado muchísima fuerza en los países más evolucionados. La contracara es que en 1940 la iglesia católica se opone contundentemente a la eutanasia y con ella se crea una dicotomía importante entre los “a favor” y los “en contra”.
No es que quiera hacer una ensalada de temas, pero no es hasta 1947 que en argentina la mujer no podía votar. Llegando a ese derecho después de un largo debate en donde algunos congresistas la consideraban un ser “no racional”. Y me pregunto…con una historia “evolutiva” tan reciente (de esto hace solo 70 años) ¿estaremos preparados para debates tan profundos?
Volviendo al tema en el año 2009 el congreso promulgó la ley 26529 que habla de muerte digna y la modificó en algunos incisos con la ley 26742. Donde se fija por sobre todo el principio de AUTONOMÍA de los pacientes. La leyes expresan en resumen: “En el marco de esta potestad, el paciente que presente una enfermedad irreversible, incurable o se encuentre en estadio terminal, o haya sufrido lesiones que lo coloquen en igual situación, informado en forma fehaciente, tiene el derecho a manifestar su voluntad en cuanto al rechazo de procedimientos quirúrgicos, de reanimación artificial o al retiro de medidas de soporte vital cuando sean extraordinarias o desproporcionadas en relación con la perspectiva de mejoría, o produzcan un sufrimiento desmesurado. También podrá rechazar procedimientos de hidratación o alimentación cuando los mismos produzcan como único efecto la prolongación en el tiempo de ese estadio terminal irreversible o incurable. En todos los casos la negativa o el rechazo de los procedimientos mencionados no significará la interrupción de aquellas medidas y acciones para el adecuado control y alivio del sufrimiento del paciente”.
Ahora si bien la justicia contempla una idea más plástica sobre el manejo de la muerte; la decisión del fin de la vida por voluntad propia del paciente o de la familia (concretamente la eutanasia) continua siendo ilegal en la Argentina. Y es ahí donde quisiera anclar las inquietudes para nuestro trabajo de hoy.
Seamos justos con la vida como así con la muerte. Si una vida aun no vivida es posible de apagar; una vida ya vivida lo es aún más. Y mucho más si sostenemos que una de ellas no sabemos lo que opina y la otra expresamente lo manifiesta. Mis hermanos seamos justos.

sábado, 13 de mayo de 2017

YO SOY SU SANGRE


El tiempo solo pasa sin parar; lo que ayer era un sueño hoy es realidad, y la realidad parece un sueño. El niño, el adolescente y el hombre se aúnan en un único grito que no deja de gritar un eterno gracias. Todo lo que soy tiene su impronta; todo en mí lleva su sello y en cada acto está su sangre.
A veces extraño esperar a mamá en el umbral de casa, y correr a su encuentro como lo haría la tempestad a la calma. A veces extraño las siestas; las tareas en la cocina; los mil abrazos y besos sin vergüenza; los retos, los mimos; a veces extraño no ser más un niño. La vida del adulto es más fría, más tenue, más solitaria…y aunque a veces uno reniegue de ello, ya no se puede volver atrás para abrigarse en un abrazo.
Extraño los desayunos con papá y la hermana; las charlas pre-colegio; las peleas a las piñas; los caballos; el fulbito en el comedor de casa. Porque aquella era “casa”, la casa de los papás es “la casa”; el verdadero refugio. Donde uno corría para sentirse a salvo; donde estaba la fuente para la solución de todos los problemas. Donde estaban mamá y papá. Extraño las idas al colegio; los partidos de futbol en el parque Urquiza. Extraño la niñez que dejo de ser.
Hoy la vida cambio; siempre en el viaje hacia delante, los recuerdos solo vuelven para mitigar el paso del tiempo. El sol hace más sombra, la vida pega más fuerte, la soledad te acompaña en cada decisión; dejaste de leer lo que escribían los viejos, para empezar a escribir vos la historia.
Hoy mientras imito a mi verdadero héroe, trato de escribir algo de lo que me enseño en las flores que crecen hoy en MI casa. Ojalá ser la mitad de mi mentor; la mitad de lo cariñoso y comprensivo de mi arquitecta. Solo hay que esperar…en mí está su sangre.
Hoy comienza la vida a doblar, si alguna vez se recibió, sin duda hay que devolver. Son las facturas que cobra la vida, y a las que uno debe pagar sin falta, antes de terminar el viaje. Hay un camino tranqueado y hay que tranquearlo hasta morir. Recto, íntegro, honesto, constante, perseverante…así fue el camino que me trazaron mis constructores. Que tatuaron a fuego el principio más importante de todos: ser un buen tipo. Ellos tuvieron también grandes mentores; recuerdos de Sicilia, llenos de rectitud, honestidad y fuerza. Consejos de amor, templanza, humildad y sencillez, que cruzan el océano y se resumen en la palabra: abuelos.
Hija si alguna vez lees esto, comprenderás que todo lo que soy me lo han enseñado. Que en mi corre la sangre de tus abuelos y de los míos. Que quien no se enorgullece de los suyos está perdido. Que la historia te forma, te templa, te rige, te acompaña y te consuela…siempre. Comprenderás el gran respeto y admiración siento por MIS “viejos”; y que yo soy su sangre.
Hija un día yo ocuparé ese lugar en vos…solo ruego a Dios dejarte tantas cosas como a mí me dejaron; y que en el final de tu viaje sientas tanta admiración hacia mí como yola siento hacia ellos. Yo seguramente ya habré comenzado el viaje eterno; pero desde donde esté, orgulloso voy a saber que fui al menos parecido a ellos. Y que también en vos…esta su sangre. Garrik