miércoles, 4 de marzo de 2009

INSEGURIDAD

Nos están matando de uno en uno. La inseguridad se pasea por las calles cada día más ausentes. La muerte grita, ya afónica, presente casi todos los días y dicen que va por el premio de la asistencia completa.
La vida ya no vale nada…ni un par de zapatillas, ni un reloj, ni una billetera, ni nada. Ya no te matan por robarte, te matan tan solo para matarte; como si el mal viviente no quisiera otra cosa que sentir esa sensación de apoderarse de la vida de su víctima. La vida ajena vale un faso de paco, una raya de cocaína diluida con vidrio, un porro mal armado, una bolsita con poxiram barato…la vida ajena vale tan solo un disparo certero, que ahorre un segundo disparo.
Al hablar de los 30000 desaparecidos en la Argentina del 1976 todos nos horrorizamos. Ahora… ¿Cuando vamos a tomar conciencia de los desaparecidos en la argentina del 2009? Si hiciéramos un recuento de todos los muertos a manos de la inseguridad desde el 2000 seguro estoy que estaríamos cerca de ese número. Estas almas hurtadas sin descanso… ¿NO SON TAMBIÉN DESAPARACIDOS EN UNA ARGENTINA NEFASTA?
Ni Bonafini ni Carlotto hablan de esto…ambas de la mano del gobierno callan y hacen como que no ven. ¿Será que estos hijos muertos no son sus hijos? O ¿Será que la familia “K” sabe callar las voces que pelearon en el ´76 por ya NO CALLAR? Y para condimentar aun más la ensalada de oscuras sensaciones, parece que los únicos humanos que tienen derechos, son los inhumanos que nos matan día a día por tan solo el deseo de matarnos. Los derechos humanos defiendes los derechos de aquellos que no respetan los nuestros…y no hablo de derechos muy complejos…simplemente del derecho de VIVIR.
La muerte nos abraza a diario y al salir de nuestras casas nos hace la venia; como diciendo “no te olvides que estoy cerca…cuando lo quiera te toca a vos”. Vivimos presos de las rejas que nosotros mismos nos ponemos para protegernos; de las alarmas que nos escandalizan y que nosotros por miedo instalamos; del miedo de ya no volver; de la angustia de sabernos indefensos; de la incertidumbre de pensar que somos los próximos…vivimos presos de esta Argentina que ya no nos alberga. Sino que solo nos rechaza; y dándonos la espalda tan solo nos deja sobrevivir.
¿Cuándo nos daremos cuanta de que hoy también hay desaparecidos? De que los derechos humanos ya no existen. De que estamos cada vez peor y que el fondo de la cosa parece ser muy muy profundo. ¿Cuándo nos daremos cuenta que nos están matando y no hacemos nada? ¿De que somos los que hacemos funcionar al país y es este quien pregona por jugarnos en contra? ¿De que sin paz no hay libertad, sin libertad no hay esperanzas y sin esperanzas no hay futuro? ¿Cuándo nos daremos cuenta?
La inseguridad se pasea por las calles y goza de poderes extraordinarios…nosotros vivimos libremente presos y tenemos sobre nosotros un pedido de captura.

En memoria de todos los desaparecidos a manos de la inseguridad…espero que algún día se haga justicia y que también algún día gritemos ¡¡¡NUNCA MÁS!!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

estuve deliberando profundamente, y llegué a una humilde conclusión: me mereces sólo una palabra, que es "gil"
no gasto más pólvora en chimangos

Garrik dijo...

Quizás estimada lectora sea verdad...y yo sea un "gil". Ahora os aseguro que no soy cobarde como UD. que escondiendose en el anonimato no se anima a ponerle identidad a su comentario. La cobardía no es de hombres así que déjeme pensar que Ud. es una mujer; como para encima de cobarde no decirle maricon.
Desde ya que al no haber fundamentos claros en su discurso no podemos discutir puntos de vista... Ud. seguramente no puede mantener una charla madura ya q su cobardía se lo impide. Prometo releer mis ideas y analizarlas nuevamente.
Un abrazo mi estimada lectora. y acepteme un consejo..."los cobardes solo juntan resentimiento".

Pd: si Ud es hombre disculpeme pero su actitud así no lo demuestra.