domingo, 23 de agosto de 2009

TENGO MIEDO

Tengo miedo de que la vida me sonría y no devolverle la sonrisa; miedo de vivir buscándole salidas a una vida que en realidad no es tan mala, y merecería ser vivida a lo grande.

Tengo miedo de acostumbrarme a ver muertes en la televisión y que ellas ya no me sorprendan; miedo de ya no sentir dolor por los que sufren y vivir como anestesiado frente a los gritos de esta sociedad que llama a “hacer algo”. Miedo a gastar la vida y que ya no me quede nada por gastar.

Tengo miedo de creer las mentiras de las iglesias; miedo de entender algún día sus silencios; y miedo de apoyar, solo cuando les conviene, sus intromisiones. Miedo de esperar de Dios la solución a un problema que no la tiene; miedo a tomar por cierto esas mentiras hoy hechas verdad; y miedo de creer justas, las millones de muertes en nombre de lo divino.

Tengo miedo de ya no pensar en que “se puede”; miedo de bajar los brazos a mitad de camino y miedo de creer que el destino ya está escrito y que solo vamos por un sendero trazado por alguien distinto a nosotros.

Tengo terror de repetir la historia que ya se viene repitiendo desde los comienzos mismos de la historia. Miedo a que se me caigan de la memoria esos recuerdos que me hacen ser “yo”; miedo a olvidar dentro de un falso perdón a esos que tanto daño nos han hecho.

Tengo miedo de perder la memoria y olvidarme hasta de mi mismo; miedo a que esa pérdida sea intencional quizás queriendo a la fuerza olvidar malas jugadas. Miedo a que el Alzheimer en mí no sea patológico y quererme olvidar de de esas cosas que hoy duele recordar.

Tengo miedo de querer algún día lo que hoy no quiero, comprendiendo que me dejé ganar por el sistema; miedo a sentir que fracasé y que lo que algún día defendí hoy ya no defiendo. Miedo a ahogarme con mis ganas de ir hasta donde ni yo mismo me detenga, y no llegar más allá de donde han llegado otros.

Tengo miedo de morir y que queden cuentas pendientes; de irme y que me queden cosas que me sigan llamando; miedo a irme y ya nunca más volver. Me queda una vida entera por recorrer y hoy temo que el gran titiritero decida no acompañarme. Tengo miedo a vivir y saber que estoy muriendo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

es de las cosas mas bonias q he leido nunca....y mira q leo libros....me emcanta, sigue escribiendo!!!