Otro 20 de junio más…la bandera nos espera con alegría que la vayamos a honrar; el monumento que se pone elegante para tatuar el sentimiento de “Argentina” en las pupilas de los que en, este día, se acuerdan que ese trapito es mucho más que el 6 a 0 a Perú.
Otro 20 de junio más…y otra vez la bandera que nos llora en soledad. La Argentina se olvida de la Argentina; el pueblo se oculta entre obligaciones turísticas y nuestros chicos le enseñan a nadie el desfile más bonito que solo el pueblo ausente pudiera disfrutar.
Otro 20 de junio más…y otra vez el grito de libertad se desvanece entre valores ya olvidados. Nuestros chicos juran la bandera: nuestros muchachos hechos ejército se obligan ante el pueblo, que ni los escucha, a defendernos. Unidos en el grito de “Si, juro” ponen su vida al servicio de esa palabra que ya tan poco hoy dice: la Patria.
Otro 20 de junio más…y nosotros que aun no nos despertamos. La bandera ya no nos representa; la patria ya no es nuestra; la escarapela carece de significado. Hoy el nacionalismo es un partido político que no aparece en las elecciones; un cartel de moralidad y honor tan antiguo como la bandera misma…si el 28 se presentara el nacionalismo sin duda perdería, es más, creo que ni tendría representantes.
Otro 20 de junio más…y otra vez el ejército se viste de gala para mostrarnos que “soldado” no es sinónimo de 76´, ni de desaparecidos, ni de “milicos”, ni de represión. Nuestro ejército nos desfila para enseñarnos quienes son, para mostrarnos las caras de los que irán a defender nuestra bandera, para lucir las armas con las que lucharán para defender nuestra libertad, para decirnos que la Argentina tiene hombres dispuestos a perder todo por ese trapito celeste y blanco…que nosotros avivamos solo ante la arenga de Maradona y cada cuatro años en un mundial.
Otro 20 de junio más…y ni la Argentina quiere ser nacionalista. ¿Para qué? Los poderes solo piensan en poder y ya no en la Argentina. La presidenta que parece que le dolió mucho el acto del campo que ya ni piensa en venir; y así entre resentimientos partidarios y cosas que nada tienen que ver con Argentina…nos olvidamos de lo que verdaderamente debiera ser un honor: ser argentino.
Otro 20 de junio más…otra vez los combatientes de Malvinas desfilan sin ser reconocidos ni siquiera el día de la bandera. Debieran doler las manos de tanto aplaudir; debiésemos llorar con ellos las 633 vidas que hoy gritan “Argentina” desde un lugar remoto que hoy ya no es más de la Argentina. Debiésemos enfermarnos de odio contra aquellos que nos quitaron esa parte de Argentina…y no hablo de las tierras, sino de las 633 vidas.
Otro 20 de junio más…o quizás ¿debiera decir uno menos? No se muere en el deceso sino en el olvido. Y hoy todos padecemos esa enfermedad que tanto daño nos está haciendo…somos máquinas de olvidar. Nuestros héroes ya muertos no son recordados; y los que hoy viven entre nosotros desde 1982…los estamos olvidando en vida.
Otro 20 de junio…y en la Argentina solo fue un feriado largo…acomodado al turismo un lunes 15.
En memoria de la Argentina que ya hoy no es Argentina.
Otro 20 de junio más…y otra vez la bandera que nos llora en soledad. La Argentina se olvida de la Argentina; el pueblo se oculta entre obligaciones turísticas y nuestros chicos le enseñan a nadie el desfile más bonito que solo el pueblo ausente pudiera disfrutar.
Otro 20 de junio más…y otra vez el grito de libertad se desvanece entre valores ya olvidados. Nuestros chicos juran la bandera: nuestros muchachos hechos ejército se obligan ante el pueblo, que ni los escucha, a defendernos. Unidos en el grito de “Si, juro” ponen su vida al servicio de esa palabra que ya tan poco hoy dice: la Patria.
Otro 20 de junio más…y nosotros que aun no nos despertamos. La bandera ya no nos representa; la patria ya no es nuestra; la escarapela carece de significado. Hoy el nacionalismo es un partido político que no aparece en las elecciones; un cartel de moralidad y honor tan antiguo como la bandera misma…si el 28 se presentara el nacionalismo sin duda perdería, es más, creo que ni tendría representantes.
Otro 20 de junio más…y otra vez el ejército se viste de gala para mostrarnos que “soldado” no es sinónimo de 76´, ni de desaparecidos, ni de “milicos”, ni de represión. Nuestro ejército nos desfila para enseñarnos quienes son, para mostrarnos las caras de los que irán a defender nuestra bandera, para lucir las armas con las que lucharán para defender nuestra libertad, para decirnos que la Argentina tiene hombres dispuestos a perder todo por ese trapito celeste y blanco…que nosotros avivamos solo ante la arenga de Maradona y cada cuatro años en un mundial.
Otro 20 de junio más…y ni la Argentina quiere ser nacionalista. ¿Para qué? Los poderes solo piensan en poder y ya no en la Argentina. La presidenta que parece que le dolió mucho el acto del campo que ya ni piensa en venir; y así entre resentimientos partidarios y cosas que nada tienen que ver con Argentina…nos olvidamos de lo que verdaderamente debiera ser un honor: ser argentino.
Otro 20 de junio más…otra vez los combatientes de Malvinas desfilan sin ser reconocidos ni siquiera el día de la bandera. Debieran doler las manos de tanto aplaudir; debiésemos llorar con ellos las 633 vidas que hoy gritan “Argentina” desde un lugar remoto que hoy ya no es más de la Argentina. Debiésemos enfermarnos de odio contra aquellos que nos quitaron esa parte de Argentina…y no hablo de las tierras, sino de las 633 vidas.
Otro 20 de junio más…o quizás ¿debiera decir uno menos? No se muere en el deceso sino en el olvido. Y hoy todos padecemos esa enfermedad que tanto daño nos está haciendo…somos máquinas de olvidar. Nuestros héroes ya muertos no son recordados; y los que hoy viven entre nosotros desde 1982…los estamos olvidando en vida.
Otro 20 de junio…y en la Argentina solo fue un feriado largo…acomodado al turismo un lunes 15.
En memoria de la Argentina que ya hoy no es Argentina.
1 comentario:
Esta bueno lo que escribiste. Pero me parace que enfermarse de odio no conduce a nada .Aparte que yo creo que la responsabilidad de la guerra en parte fue argentina , porque fue el ultimo grito de ahogo del gobierno dictatorial , que habia en esa epoca.Ganar las Malvianas era lo unico que los podia llegar a salvar de la gran perdida de popularidad q estaban teniendo.Necesitaban algo bueno , para tapar todo el horror que estaban haciendo.Y sin embargo , perdimos , las vidas , perdimos las islas , perdimos las vidas de los desaparecidos.... perdimos , perdimos. Siempre perdemos como pueblo.
El mayor problema de la Argentina es la carencia total de nacionalismo, que como vos bien decis solo saca a relucir su bandera para un mundial. Una pena que estemos llegando al bicentenario de la independencia y en 200 años podamos contar con los dedos de una mano los grandes politicos.
Es triste pensar que no hay estadistas , que a quienes nos gobiernan solo les importe ganar la eleccion y conservar el puesto , y que los planes no sean mas alla de los 4 años de su mandato.
Y otro grave problema q tenemos los argentinos es q no aprendemos. Cuantas dictaduras hubo?....Cuantos menemns , cuantos kirchners , cuantos de la ruas ,,,, siempre lo mismo. Tropezamos siempre con la misma piedra. Y no llegamos a nada.En vez de un camino , yo creo vamos dibujando un circulo.
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